jueves, 27 de enero de 2022

EVANGELIO DEL DOMINGO: JESÚS QUIERE CAMBIAR NUESTROS ESQUEMAS

En aquel tiempo, todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia de Jesús que salían de sus labios. Y decían: ¿No es éste el hijo de José?

Y Jesús les dijo: Sin duda me recitaréis aquel refrán: “Médico, cúrate a ti mismo”; haz también aquí en tu tierra lo que hemos oído que has hecho en Cafarnaún.

Y añadió: Os aseguro ningún profeta es bien mirado en su tierra. Os garantizo que en Israel habla muchas viudas en tiempos de Elías, cuando estuvo cerrado el cielo tres años y seis meses, y hubo una gran hambre en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías, a una viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos leprosos habla en Israel en tiempos del profeta Elíseo; sin embargo, ninguno de ellos fue curado, más que Naamán, el sirio.

Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo. Pero Jesús se abrió paso entre ellos y se alejaba. (Lc 4, 21-30)


Jesús, tú quieres tallar nuestro corazón como buen carpintero y maestro de la sabiduría. ¿Lograrás sacar del tronco de nuestra existencia una obra agradable a tus ojos? ¿Lograremos entender que tú nos ofrecemos de la madera una escalera para llegar al Cielo?

En tu pueblo no te hicieron caso. No creían en el hijo del carpintero. A veces la sencillez y la humildad no “vende”. Más bien, quieren “despeñarte”. Tú, sin embargo, sigues empeñado en tallar nuestra alma, a pesar de todos los riesgos. No te canses nunca, Maestro carpintero, de realizar esa noble tarea, a ver si consigues que latamos a tu ritmo, que nos empleemos en tus opciones y en tu manera de afrontar los desafíos de la vida.

Dios carpintero, pule la madera de nuestro ser con el cepillo de tu misericordia y de tu amor. Jesús, hijo del carpintero de Nazaret, haz que nuestra miopía no impida contemplar tu plan que sobrepasa nuestras cortas miradas. 

Dibu: Patxi Velasco FANO
Texto: Fernando Cordero ss.cc

No hay comentarios:

Publicar un comentario