viernes, 31 de enero de 2020

EVANGELIO DEL DOMINGO: Presentación en el templo

Cuando llegó el tiempo de la purificación de María, según la ley de Moisés, llevaron a Jesús a Jerusalén, para presentarlo al Señor..... Y cuando cumplieron todo lo que prescribía la Ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño iba creciendo y robusteciéndose, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba

María y José llevaron a Jesús al templo de Jerusalén, ocho días después de su nacimiento, para ofrecerlo al Señor Dios según la costumbre los judíos. Dieron gracias por el niño y entregaron como regalo dos palomas.

Estaba por allí un anciano llamado Simeón que al ver al niño en brazos de su madre dijo: "¡Gracias a Dios porque estoy viendo con mis propios ojos a quien será luz para iluminar a nuestro pueblo y a todas las naciones de la tierra! Ya puedo morir en paz.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.

jueves, 30 de enero de 2020

Día Escolar de la No-violencia y la Paz

El "Día Escolar de la No-violencia y la Paz" (DENIP), fundado en 1964 y conocido también por Día Mundial o Internacional de la No-violencia y la Paz, se celebra el 30 de enero y es una iniciativa pionera, no estatal, no gubernamental, no oficial, independiente, libre y voluntaria de Educación Noviolenta y Pacificadora, practicada ya en escuelas de todo el mundo y a la que están invitados a participar los centros educativos de todos los países. Se celebra con motivo del aniversario de la muerte de de Mahatma Gandhi, el hombre del “alma grande”, que con su lucha pacífica y sus acciones de noviolencia, consiguió que la independencia de la India, su país natal, se hiciera realidad.

“Amor universal, No-violencia y Paz. El amor universal es mejor que el egoísmo, la No-violencia es mejor que la violencia y la Paz es mejor que la guerra “. Este es el mensaje básico que propone el “Día Escolar de la No-Violencia y la Paz” (DENIP).

Este Día defiende y promueve el amor universal, la no-violencia, la tolerancia, el respeto por los Derechos Humanos, la solidaridad y la Paz.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.

miércoles, 29 de enero de 2020

CUENTO: La pelea del cuerpo

Érase un cuerpo perfecto, armonioso y fuerte en el que todos sus miembros se desenvolvían en perfecta coordinación y efectividad. Hasta que en cierto momento de agobio dijo la mano derecha a la izquierda: “Esto se está pasando, date cuenta cómo trabajamos: nosotras no paramos un segundo y total... sólo para tener al estómago contento: él no pega ni golpe”.

Con similar argumento también las piernas se quejaban: “Y nosotras le llevamos aquí y allá, paseándolo tan ricamente y él se limita sólo a dejarse llevar. ¡Vaya caradura!”.

Así que las partes del cuerpo decidieron ponerse en huelga pues estaban cansadas de trabajar para que el estómago tuviese comida.

Pasaron unos días y todas las partes del cuerpo se sentían desfallecer. Entonces el estómago habló: “Yo también me siento muy débil. Si me alimentáis podré trabajar de nuevo y vosotros y yo nos sentiremos mejor”.

“Bueno, vale la pena probarlo” –dijo la mano derecha.

Y las piernas con mucha dificultad llevaron el cuerpo a la mesa, las manos cooperaron y metieron la comida en la boca. Al poco rato, todos los miembros del cuerpo empezaron a sentirse mejor.

Entonces comprendieron que todos los miembros del cuerpo deben cooperar unos con otros si quieren conservarse con buena salud. Y el estómago entendió también que él dependía del trabajo de los demás miembros y que debía repartir por igual con los demás miembros todo lo que a él le llegara.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.

martes, 28 de enero de 2020

COMENZAMOS LA SEMANA: Damos las gracias

Cierra los ojos y haz un par de respiraciones profundas, y después deja simplemente que la respiración vaya a su ritmo natural. Observa la sensación del aire, como entra por la nariz y, cuando estés preparado / a, piensa en una persona, a la que amas, por la que te interesas o preocupas y sientes ternura, visualizando su imagen. Observa la sensación que sientes al conectar con ella ahora, aunque no esté contigo, y en silencio ve dándole las gracias: por todo lo que hace por ti, por los momentos agradables que compartir, aunque sean pequeñas cosas, simplemente por existir y por estar presente en tu vida. Mantente unos minutos en estos sentimientos de agradecimiento y calidez observando el efecto de la respiración en la zona del corazón y en el cuerpo. Cuando estés listo/a, puedes abrir los ojos escuchar esta oración.

Rezamos juntos
Gracias, Señor, porque me has dado ojos para ver.
Gracias, porque los ojos me permiten ver la luz,
los colores, el arco iris,
a mis padres, a las personas que quiero,
a mis amigos...
Señor, tú eres la luz.
Dame de esa luz para que yo pueda alumbrar
al que está triste,
al que tiene miedo,
al que está solo.
Ayúdame a compartir mi luz, mi fe,
mis cosas y mis cualidades con todos.

viernes, 24 de enero de 2020

EVANGELIO DEL DOMINGO: Pescadores de hombres (Mt. 4, 12-23)

En aquel tiempo, al enterarse Jesús de que habían arrestado a Juan, se retiró a Galilea. Dejando Nazaret se estableció en Cafarnaún, junto al mar, en el territorio de Zabulón y Neftalí, para que se cumpliera lo dicho por medio del profeta Isaías: «Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí, camino del mar, al otro lado del Jordán, Galilea de los gentiles. El pueblo que habitaba en tinieblas vio una luz grande; a los que habitaban en tierra y sombras de muerte, una luz les brilló». Desde entonces comenzó Jesús a predicar diciendo: «Convertíos, porque está cerca el reino de los cielos». Pasando junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos, a Simón, llamado Pedro, y a Andrés, que estaban echando la red en el mar, pues eran pescadores. Les dijo: «Venid conmigo y os haré pescadores de hombres». Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron. Y, pasando adelante, vio a otros dos hermanos, a Santiago, hijo de Zebedeo, y a Juan, su hermano, que estaban en la barca repasando las redes con Zebedeo, su padre, y los llamó. Inmediatamente dejaron la barca y a su padre y lo siguieron.

Jesús recorría toda Galilea, enseñando en sus sinagogas, proclamando el evangelio del reino y curando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. Jesús nos llama y, para seguirlo, debemos dejar aquellas cosas que hasta ahora considerábamos necesarias. Jesús nos cambia la vida. No quiere que pesquemos peces, sino hombres. Nos sobran nuestras redes habituales. Con esas se hace dinero, se consigue prestigio y poder; pero Jesús quiere que pesquemos hombres. Esto se hace sólo con Amor. Esas han de ser nuestras redes.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.

jueves, 23 de enero de 2020

BUENOS EJEMPLOS: Mohamad Al Jounde, Ganador del Premio Internacional de la Paz Infantil 2017

Mohamad creció en Siria, pero huyó al Líbano cuando la vida se volvió demasiado peligrosa en su hogar. Al igual que miles de otros niños refugiados en el país, no podía ir a la escuela, por lo que se propuso marcar una diferencia para los niños en la misma situación. Junto con su familia, Mohamad construyó una escuela en un campamento de refugiados donde 200 niños ahora tienen acceso a su derecho a la educación. A la edad de 12 años, ya estaba enseñando matemáticas y fotografía. Él ayuda a los niños a sanar, aprender y divertirse con juegos y fotografía. Mohamad recurre a sus mayores pasiones, la fotografía y el cine, para contar las historias de sus compañeros, los niños refugiados, en toda su diversidad. "No tuve la oportunidad de ir a la escuela, y quería hacer todo lo posible para asegurarme de que esto no les suceda a los niños más pequeños". Las palabras de Mohamad nos muestran un gran compromiso para ayudar a los demás.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.

miércoles, 22 de enero de 2020

CUENTO: El día y la noche

Preguntó un sabio a sus discípulos si sabrían decir cuando acababa la noche y empezaba el día.
Uno de ellos dijo: Cuando ves a un animal a distancia y puedes distinguir si es una vaca o un caballo.
– No, – dijo el sabio.
Otro discípulo dijo: Cuando miras un árbol a distancia y puedes distinguir si es un mango o un anacardo.
– Tampoco, – dijo el sabio.
Entonces los demás discípulos dijeron: ¡Esta bien! ¿Dinos cuándo es? Y el sabio respondió:
– Cuando miras a un hombre al rostro y reconoces en él a tu hermano; cuando miras a la cara a una mujer y reconoces en ella a tu hermana. Si no eres capaz de esto, entonces, sea la hora que sea, aún es de noche.

Estamos muy acostumbrados a poner fronteras a todo tipo de personas. Es lo que nos han enseñado desde pequeños. Es más, incluso ponemos fronteras invisibles, de las que muchas veces no somos conscientes. Jugando con el simbolismo que supone la luz y la oscuridad, la noche y el día, el cuento nos presenta las fronteras que ponemos a diario en nuestro trato con los demás. Muchas estructuras nos separan, pero lo que más nos aleja de los otros son nuestras propias actitudes, aquellas que decidimos poner en nuestras vidas: superioridad, soberbia, rivalidad,... son sólo algunas de ellas. 

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.

martes, 21 de enero de 2020

DECÁLOGO PARA CRECER EN LA PAZ

1.- Eres alguien muy importante. Quiérete.
2.- Valora tus amigos. Les dará seguridad.
3.- Descubre todo lo que te une a los demás por encima de lo que te separa.
4.- Respeta las opiniones. Así contribuirás al diálogo.
5.- Aprende a escuchar, comprenderás mejor a los demás.
6.- Esfuérzate en terminar tus tareas. Disfrutarás con el resultado.
7.- Cumple con tus responsabilidades, los demás lo necesitan.
8.- Trabaja en grupo. Nadie sabe más que todos juntos.
9.- Comparte tus cosas con los demás. Te hará muy feliz.
10.- Pon paz dentro de ti, así pondrás paz a tu alrededor.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén. 

lunes, 20 de enero de 2020

COMENZAMOS LA SEMANA: Meditación de la empatía

Trata de hacer silencio exterior e interior. Coge aire con los ojos cerrados. Piensa en alguna pelea que hayas tenido recientemente con algún amigo/a, o tal vez con alguien de la familia. No pienses mal de la otra persona, debes tranquilizarte y respirar profundamente mientras recuerdas lo ocurrido. ¿Qué sentiste? ¿rabia?, ¿envidia?, ¿vergüenza? Visualiza la emoción. Piensa el porqué esta persona actuó así y trata de comprender su actitud.
Ahora vuelve a pensar en el conflicto y cambia tu actitud pensando en positivo: ríe con el amigo, abraza a la amiga, jugad juntos... ¿Qué sientes? ¿alegría? ¿tranquilidad? ¿paz?, ¿CÓMO TE SIENTES?
Antes de abrir los ojos, desde el corazón, con suavidad y lentamente nos decimos: "Gracias". Mantenemos el silencio unos segundos y abrimos los ojos para rezar esta oración.

VIVIR A LA MANERA DE JESÚS
Cuando pensamos primero en los otros.
Cuando nos preocupamos por los demás.
Cuando acudimos en ayuda del que necesita.
Cuando nos acordamos del que tenemos al lado.
Cuando compartimos los bienes que tenemos.
Cuando acompañamos a los que sufren.
Cuando damos nuestro tiempo para beneficio de otros.
Cuando colaboramos para mejorar la situación de quienes menos tienen.
Así es como vivimos a la manera de Jesús.

viernes, 17 de enero de 2020

EVANGELIO DEL DOMINGO: El cordero de Dios (Jn. 1, 29-34)

Al día siguiente, Juan vio a Jesús que se acercaba a él, y dijo: ¡Mirad, ese es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo! A él me refería yo cuando dije: ‘Después de mí viene uno que es más importante que yo, porque existía antes que yo.’ Yo mismo no sabía quién era él, pero he venido bautizando con agua precisamente para que el pueblo de Israel le conozca. Juan también declaró: He visto al Espíritu Santo bajar del cielo como una paloma, y reposar sobre él. Yo aún no sabía quién era él, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: ‘Aquel sobre quien veas que el Espíritu baja y reposa, es el que bautiza con Espíritu Santo.’ Yo ya le he visto, y soy testigo de que es el Hijo de Dios."

Juan da testimonio de Jesús. Nos lo presenta como el Cordero de Dios. El cordero bueno del que habla el profeta Isaías. Él quita, con su amor, con su entrega, los pecados del mundo. El Espíritu Santo reposa sobre Él. Juan dice que no lo conocía y por eso se ha dirigido a la gente, para encontrarlo. Si nosotros queremos conocerlo, también debemos dirigirnos a la gente. Él mismo nos dijo que lo encontraríamos en el pobre, en el perseguido, en el hambriento, en el desnudo, en el enfermo... A Jesús no se le encuentra encerrado en un templo. Se le encuentra en el templo que es el hermano. Si sabemos mirar, veremos al Espíritu Santo reposando sobre él.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.

jueves, 16 de enero de 2020

BUENOS EJEMPLOS: Rigoberta Menchú

Activista por la Paz y los Derechos Humanos de los pueblos indígenas, Premio Nobel de la Paz 1992, destaca por su oposición al ejército de su país, asesora personal del Director General de la Unesco y presidente de la Iniciativa Indígena para la Paz. Rigoberta Menchú Tum nació en Chimel, Guatemala, en 1959, y es descendiente de la antigua cultura Maya-Quiché. De niña trabajó en los campos. Fue testigo del asesinato de su hermano de 16 años, víctima de los terratenientes que querían despojar a los indígenas de sus tierras. Su padre, Vicente Menchú, se lanzó a una activa labor de concienciación de sus vecinos, lo cual produjo un impacto en Rigoberta, que empezó así a elaborar su pensamiento social. Fue empleada doméstica en la ciudad, donde conoció la injusticia, la discriminación y la miseria que aflige a los indígenas de Guatemala. El 31 de enero de 1980 su padre murió quemado en la embajada de España en Guatemala, donde se había encerrado junto con 38 personas, en su mayoría campesinos, para protestar por la situación indígena, durante el asalto que realizó la policía. Poco después, Rigoberta perdió también a su madre, víctima de secuestro, tortura y asesinato por parte de grupos paramilitares. Rigoberta Menchu es la primera mujer de raza indígena que recibe el Premio Nobel de la Paz por sus continuados esfuerzos en pro de sus hermanos sometidos.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.  
 

miércoles, 15 de enero de 2020

CUENTO: Los dos pájaros

Dos pájaros estaban muy felices sobre la misma planta, que era un sauce. Uno de ellos se apoyaba en una rama en la punta más alta del sauce, el otro estaba más abajo, en la bifurcación de unas ramas. Después de un rato, el pájaro que estaba en lo alto dijo para romper el hielo: -¡Oh, qué bonitas son estas hojas tan verdes! El pájaro que estaba abajo lo tomó como una provocación y le contestó de modo cortante: -¿Pero estás cegato? ¿No ves que son blancas? Y el de arriba, molesto, contestó: -¡Tú eres el que estás cegato! ¡Son verdes! Y el otro, desde abajo, con el pico hacia arriba, respondió: -Te apuesto las plumas de la cola a que son blancas. Tú no entiendes nada, so tonto. El pájaro de arriba notaba que se le encendía la sangre y, sin pensarlo dos veces, se precipitó sobre su adversario para darle una lección. El otro no se movió. Cuando estuvieron cercanos, uno frente a otro, con las plumas encrespadas por la ira, tuvieron la lealtad de mirar los dos hacia lo alto, en la misma dirección, antes de comenzar el duelo. El pájaro que había venido de arriba se sorprendió: -¡Oh, qué extraño! ¡Fíjate que las hojas son blancas! E invitó a su amigo: -Ven hasta arriba adonde yo estaba antes. Volaron hasta la rama más alta del sauce y esta vez dijeron los dos a coro: -¡Fíjate que las hojas son verdes!

La personalidad que es autoritaria excluye los puntos de vista de los demás e intenta imponer los suyos: la realidad sólo es tal como él la ve. Pero hay otras visiones y otros caminos. Sólo cuando nos movemos de nuestras posiciones tomadas previamente, podemos entender la realidad en su complejidad y, sobre todo, entender al otro.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén.

martes, 14 de enero de 2020

REFLEXIÓN: El compromiso

Permaneced firmes en la fe” (1ª Cor 13, 16)

Todos nosotros hablamos mucho, decimos muchas cosas y nos comprometemos, pero muchas de estas palabras se las lleva el viento. A veces son palabras vacías que no escuchamos ni nosotros mismos. Cuando nos comprometemos a hacer algo debemos esforzarnos a cumplirlo. No se vale hacer ver que no lo recordamos o que nos hemos olvidado. Jesús, ayúdanos a recordar nuestros compromisos y ser fieles a nuestra palabra. Gracias por el don de la palabra que nos ayuda a comunicarnos los unos con los otros. Las palabras nos acompañan toda la vida y nos hacen crecer. Te rogamos que sepamos hacer un uso correcto y no las malgastamos en mentir o en insultar a nuestros compañeros.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén. 

lunes, 13 de enero de 2020

COMENZAMOS LA SEMANA: Estaciones de las emociones

En la dinámica de hoy llevaremos a cabo una visualización que nos lleve a detenernos ante nuestras emociones. Nos colocaremos cómodos en una espacio tranquilo, y con los ojos cerrados imaginaremos que somos un tren: el tren de las emociones. El tren circulará por el país de las emociones y realizará tres paradas en tres estaciones de emociones diferentes. En cada una de las estaciones, cada uno deberá analizar qué siente en esa emoción. Una vez identifique lo que siente y percibe, el tren seguirá en marcha para llegar a la siguiente emoción. El proceso será el mismo hasta llegar a la tercera estación. Finalizado nuestro trayecto en tren, compartiremos nuestras estaciones con el grupo y lo que cada una de ellas nos ha aportado.

Rezamos juntos
Buenos días, Señor.
Un nuevo día que me regalas.
Gracias con toda la fuerza de que soy capaz.
Gracias por este nuevo amanecer.
Gracias por este nuevo empezar.
Gracias por tu presencia, que me acompañará en toda la jornada.
Quiero comenzar este nuevo día con entusiasmo,
con alegría reestrenada, con ilusión nueva.
Me da seguridad el saber que Tú estás a mi lado:
en mi familia, en mis amigos,
en la gente con la que me voy a encontrar,
en mi propia persona.
Te ofrezco mi trabajo de este día.
Que mi esfuerzo sirva para la felicidad de los demás
y me ayude a encontrar mi propia paz.
Que, con mi trabajo, mi día sea un pedacito del mundo que busco y sueño.
Ayúdame a llenarlo de entrega y amor.
Señor, que hoy viva de tal manera que cuantos se acerquen a mí
descubran tu presencia y tu ternura.
Buenos días, Señor.

viernes, 10 de enero de 2020

EVANGELIO DEL DOMINGO: El Bautismo de Jesús (Mt. 3, 13- 17)

En aquel tiempo fue Jesús desde Galilea al río Jordán, a donde estaba Juan, para que este le bautizase. Al principio, Juan se resistió diciéndole: Yo tendría que ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí? Jesús le contestó: Déjalo así por ahora, pues es conveniente que cumplamos todo lo que es justo delante de Dios. Entonces Juan consintió. Jesús, una vez bautizado, salió del agua. En esto el cielo se abrió, y Jesús vio que el Espíritu de Dios bajaba sobre él como una paloma. Y se oyó una voz del cielo, que decía: Este es mi Hijo amado, a quien he elegido.

El Bautismo del Jordán significa para Jesús un antes y un después. El hijo del carpintero pasa a ser el Hijo amado, el elegido del Padre. El bautismo es para Jesús un encuentro, la experiencia de Dios, el momento en que el Espíritu se posa sobre Él. A partir de ese momento Jesús empezará a recorrer Galilea sanando, devolviendo la vista, curando a leprosos, expulsando demonios, haciendo caminar... Su experiencia de filiación le lleva a derramar ese amor del padre sobre todos.
 Todos necesitamos tener una experiencia de Dios. Por eso hemos de buscar momentos de silencio, de contacto con la naturaleza, de entrega a los más desfavorecidos, de amor a los que nos rodean. Es en esos momentos que nos sentiremos llenos de Dios, que, como Jesús, nos sentiremos llenos de su Espíritu e hijos del Padre. Y esa experiencia, hará cambiar por completo nuestras vidas...

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén. 

jueves, 9 de enero de 2020

BUENOS EJEMPLOS: Juanma Barrientos, cocinando por la PAZ

Juan Manuel Barrientos nació en Medellín en 1983 y es el fundador de la cadena de restaurantes ElCielo (Medellín, Bogotá, Miami). A sus 33 años, Juanma ha sido reconocido entre los 50 mejores chefs de Latinoamérica y es uno de los cinco cocineros del mundo con más influencia y seguidores en las redes sociales. Con el compromiso de ir más allá y ayudar a “cocinar la paz de Colombia” y con la firme convicción de que dicha paz se construye uniendo a los colombianos, ElCielo conformó hace varios años La Fundación ElCielo. La Fundación ElCielo es un lugar donde se capacita en cocina a soldados heridos por minas anti-persona o en combate, exguerrilleros, exparamilitares, para que estén preparados en un oficio y para que se reconcilien y perdonen con sus antiguos enemigos. El Restaurante ElCielo y su fundación también capacitan a madres, cabezas de familia, esposas de soldados retenidos, campesinos e indígenas que se han visto obligados a abandonar su lugar de origen. A través de estos años han sido más de 300 personas las capacitadas. ElCielo dona el 30% de sus ganancias anuales al sostenimiento de estos proyectos de responsabilidad social.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén. 

miércoles, 8 de enero de 2020

CUENTO: El alacrán

Un maestro oriental vio cómo un alacrán se estaba ahogando, y decidió sacarlo del agua, pero cuando lo hizo, el alacrán le picó. Por la reacción al dolor, el maestro lo soltó y el animal cayó al agua y de nuevo estaba ahogándose. El maestro intentó sacarlo otra vez y otra vez el alacrán le picó. Alguien que había observado todo, se acercó al maestro y le dijo: “Perdone maestro, ¡pero usted es terco! ¿No entiende que cada vez que intente sacarlo del agua el alacrán le picará?”. El maestro respondió: “La naturaleza del alacrán es picar, él no va a cambiar su naturaleza y eso no va a cambiar la mía, que es ayudar y servir”. Y entonces ayudándose de una hoja, el maestro sacó al animalito del agua y le salvó la vida.

No cambies tu naturaleza si alguien te hace daño, sólo toma precauciones. Algunos buscan la felicidad, otros la rechazan. No permitas jamás que la conducta de otras personas condicione la tuya. Cuando la vida te presente mil razones para llorar, muéstrale que tienes mil y una razones por las cuales sonreír.

Jesús, queremos pedirte que nos ayudes a ser instrumentos de tu paz. Que en vez de enfadarnos cuando no conseguimos lo que queremos, valoremos lo que ya tenemos. Que en vez de querer las cosas sólo para nosotros, disfrutemos compartiéndolas con los demás. Que en lugar de lamentarnos por las cosas que están mal, nos pongamos en marcha e intentemos cambiarlas. Que cuando alguien se enfade por nuestra culpa, seamos capaces de pedir perdón. Que cuando nos encontremos con alguien que no esté tranquilo, elevemos una oración por él. Amén. 

martes, 7 de enero de 2020

ORACIÓN: GRACIAS POR EL NUEVO AÑO

Al comenzar este año queremos darte gracias,
por todo lo que recibimos de Ti.
Gracias por nuestras familias y amigos,
gracias por la vida y el amor,
por las flores, por el aire y el sol,
por la alegría y el dolor,
por todo lo que es posible y por lo que no puede ser.
Te ofrecemos lo que hemos hecho hasta la fecha:
el trabajo que hemos realizado,
las cosas que han pasado por nuestras manos,
y lo que con ellas hemos podido construir.
Pero también te pedimos perdón por no hacer lo que Tú quieres,
por pereza, por conformistas; y, por qué no, por cobardía.
Hemos iniciado un nuevo año y detenemos nuestra vida
ante el nuevo calendario aún sin estrenar.
Te pedimos, la paz y la alegría,
la fuerza y la prudencia,
la claridad y la sabiduría.
Que nuestro espíritu, se llene de bendiciones.
Llénanos de bondad y de alegría,
porque cuantos conviven con nosotros, o los que se nos acerquen,
encuentren en nuestras vidas, un poquito de Ti.
AMÉN