SOMOS DE LA PAZ

La paloma de la Paz había acudido a un montón de sitios, en todo el mundo, muchas personas la necesitaban. La pobre Paloma estaba agotada con tantas tareas y cayó rendida sobre una rama. Su Amigo el búho se acercó para cuidarla. El, que era muy sabio, porque sabía escuchar con atención, escuchó todos sus cansancios y tuvo una idea.

Convocó una asamblea. Llamó a todas las aves del planeta... La reunión empezó con una canción y después de hablar, de debatir y de proponer distintas soluciones para ayudar a la paloma de la Paz, tomaron una decisión. Fueron volando hasta un campo de olivos y... Cada pájaro, desde el más grande hasta el más pequeño, desde el avestruz hasta el colibrí, se presentaron delante le la paloma de la Paz con una ramita de olivo en su pico y le dijeron: NO ESTÁS SOLA, ESTAMOS CONTIGO, NOS UNIMOS A TI, a partir de hoy TODAS SOMOS AVES DE LA PAZ.

La paloma sonrió al ver al tucán de la Paz y al buitre de la Paz y a la gallina de la Paz con sus pollitos de la Paz, allí estaban las golondrinas de la Paz y los flamencos de la Paz... El resto de animales viendo lo que pasó quisieron ayudar al planeta y así surgió: el cocodrilo de la Paz y el cerdito de la Paz y el koala de la Paz y el canguro de la Paz.

Toda una granja entera se hizo de la Paz: con el gallo de la Paz, la vaca de la Paz, los patos de la Paz, los caballos de la Paz... y también los animales de los bosques, las selvas, las sabanas, de los océanos... ¡fue precioso!

Finalmente los seres humanos se dieron cuenta y decidieron también SER de la PAZ... Se fueron sumando de todos los países, de todos los pueblos, de todas las etnias, de todas las culturas, de todas las edades. Fue entonces cuando la paloma de la Paz escuchó gritar a todo el planeta unido: ¡SOMOS DE LA PAZ!