domingo, 29 de marzo de 2020

EVANGELIO DEL DOMINGO: LA RESURRECCIÓN DE LÁZARO

Cuando hemos estado enfermos hemos avisado o han avisado por nosotros a nuestros seres más queridos, familiares y amigos. En esos momentos las personas sabemos responder, dejamos nuestras ocupaciones para demostrar nuestro cariño hacia el enfermo. Hoy en el evangelio, Jesús va a ponerse en camino para ir a ver a su amigo enfermo. Y nos va a enseñar la lección más importante.


PARA MEDITAR
La muerte en tiempos de Jesús como hoy es un desafío a la razón y al corazón del hombre. Este pasaje de la Resurrección de Lázaro quiere darnos a los creyentes motivos para confiar, para esperar en Dios. Dijo san Pablo que si Cristo no hubiera resucitado nada tendría sentido. Nuestra vida se extinguiría sin más con nuestra muerte. Gracias a Dios, por la fe, sabemos que esto no es así.
En estos días hay muchas personas sufriendo por una pandemia que estamos viviendo. Y todos estamos poniendo nuestro granito de arena para que esto acabe pronto. Con lo que todos hacemos para no contagiarnos y para no contagiar a los demás estamos regalando vida, que es una de los grandes regalos que nos da Dios..

PARA HACER VIDA EL EVANGELIO
  • Estos días estamos viviendo situaciones difíciles. Pero vamos a recordar alguna situación de esperanza que hayamos vivido.
  • ¿Qué es para los cristianos la esperanza? ¿Cómo podemos transmitir los cristianos la esperanza unos a otros?
  • Esta semana vamos a orar por las noches por todas las personas que lo están pasando mal..

ORAMOS
Tú, Señor, eres bálsamo para nuestras heridas,
resurrección para nuestras muertes,
salud para nuestras enfermedades,
consuelo para nuestros desamores,
aceptación para nuestros fracasos.
Tú potencias nuestra parte de Marta y de María,
nuestra capacidad activa tanto
como la contemplativa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario